Fa goig

La nostra terrassa tancada fa goig, les nostres deu orquídies, bé ara ja en són onze, ja han començat a florir, estan en plena oberta de capolls i es veuen precioses, la tomaquera gegantina, fa floretes grogues, encara que no tomàquets, però a mi m'encanta la seva olor i la tracto com si ens fes… De geranis, ara només en tenim dos de vermells, ells sempre bonics i agraïts, fan flors gairebé sense parar, en vam arribar a tenir de vint classes diferents quan encara no teníem la terrassa tancada...

Nuestra terraza

En su momento, cerramos la terraza con ventanales de aluminio blanco. Bien, se convirtió en una habitación más, mandando al garete mis 25 clases de geranios diferentes, pero emergiendo una sala de maquinitas variadas y, allá en un rincón redondeado, la magia de nuestras orquídeas que persisten en el tiempo con su hermosura. Aquí trabajábamos corrigiendo y preparando exámenes, aquí montábamos las clases y éramos felices con nuestro trabajo de profesores. Hoy hemos despejado la larga mesa, nos hemos sentado en nuestros respectivos sitios, Teresa al teclado de su ordenador, yo escribo a mano... y lo cuento.