deja un camino iluminado perfecto,
por donde los cometas practican la noche…
Te busqué entre las sombras del sueño,
entre los amaneceres del amarillo rojo,
entre los despertares de a media noche,
con sobresalto de la cama hacia el encuentro…
Te busqué entre las patas de mis mariposas,
para ver si había resquicio de origen
con derecho a retorno al hogar…
Te busqué entre la luz de una hoguera,
donde te escondías en la claridad natural…
Te busqué por los inventos y los siempres,
hasta que un día… me encontraste.
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