Te quiero, parece...

Te quiero, porque te siento en cada espacio,
y te respiro en cada poro vital.
Te quiero, porque desvaneces los miedos,
acicalas mis prontos y rizas mis alas.
Te quiero, porque eres libro y referencia,
origen, luz y consenso, ejemplo…
Te quiero, porque lo inspiras todo
y haces fáciles hasta los excesos,
y haces música de los silencios,
y plenitud de todos los vacíos…
Te quiero, porque no necesito ni un café,
y me pegué en tu miel cual tela de suave araña
devorando lenta y en delicia.
Te quiero, por los cielos donde no se manda.
Te quiero, porque te siento y te veo.
Te quiero porque formas parte
de los dedos de mi alma…