A veces llegan las mañanas cargadas,
con las ilusiones trabajadas a pulso,
y nos acaban los sueños y esperanzas
con los que vivíamos tan felices…
Gloriosos caminos hacia las metas.
Algunos suelen decir que los éxitos
son de repercusión inferior y de impacto
al esfuerzo y la constancia en el empeño.
Despertar sano y bien, lúcido, seguro,
porque sabes y vas por la vida cierta
y te recreas en la buena sombra
de los árboles que hay en la buena dirección.
Parece ser que quien acaba algo.
Quien consigue un logro, una carrera,
quien consigue ser doctor, sabio,
o perito en cualquiera materia deseada…
cuando ya ha conseguido su delirio,
siente como un vacío y descarga.
Esto ocurre minutos antes de ser consciente
del cambio de responsabilidades…
No, no es lo mismo ir de joven potente,
protegido por todos los amores e ilusiones,
que de docto licenciado en todo,
con la soledad del que marca o crea, juzga,
o, en el peor de los casos, decide…
Ilusión, esperanza, meta, éxito…
Me encantó cuando en las evaluaciones
se tuvieron en cuenta los procedimientos…
en ellos se goza y progresa en el aprendizaje.
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