Vuelta al cole

Mandé un mensaje de ánimo al mundo,
al docente, educandos y educados.
Mandé un aliento a la ilusión, a la vida,
y me recreé en la nostalgia y el ritmo.
Mi mujer, la de siempre, tuve suerte,
profesora, como yo, de vocación,
hace ya unos días que recela, vigila…
Ella también es metódica, ordenada y previsora,
y se prepara con celo y gusto.
Despertador, ducha y sonrisa…
se ve, nos vemos, en la fila con niños.
Estar cerca de los niños es como gozar
del aura de la que les hablo alguna vez,
son un resplandor, un remanso neto
donde siempre hay mucho que hacer…
Mucho bien y bueno que hacer
ante los procederes de buen fondo
con formas alternas, de los niños cielo.
Mis compañeros, el café de la entrada,
tiempos ha, el cigarrillo bajo el tilo,
los ánimos mutuos, las conversaciones…
aquellas variadas y repetitivas de los maestros.
Las anécdotas, las salidas de tono,
el eterno gracioso, el talento, la envidia,
el esfuerzo, la constancia, la gratitud…
Pienso en cuánto me ayudaron mis compañeros,
cuánto aprendí, sobretodo de los niños.
Vuelta al cole… ¡que seáis felices!