Uno siempre tiene amistades variadas.
Se siente… hasta buena persona por esto,
y pasea sus emociones acompañado
por las diferencias y las sensaciones.
Hoy voy del brazo de la modestia,
virtud que modera mis acciones
y me contiene en los límites de mi condición.
Suelo disfrutar con mis paseos intensos,
con la presencia que me da cordura,
templanza, moderación, medida.
Con la verdad estoy a gusto y pienso en Aristóteles:
"Amigo Platón, pero más amiga la verdad"... buena gente.
El otro día salí un rato, casi sin querer,
con la prudencia en caballo de orgullo,
y me caí de gordo hinchado, insolente.
Y es que ya se sabe… no todo sirve,
no todo vale, no todos son amigos,
algunos lo parecen, los otros lo son.
Suelo estar feliz con la fe en la bondad
y la constancia, sin negocio en ello.
Con la libertad me respiro unos aires,
que serían nocivos en la indecencia,
y me calmo… no así con la justicia,
que con frecuencia me cabrea…
por sus tratos, evidentemente, injustos.
Quiero acostarme con la conciencia en paz,
dormir con la fe en lo mejor del futuro.
Uno tiene amigos, amistades, algunos… amigos.
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