¿Nunca te acariciaron de lejos,
o te allanaron los caminos,
o te abrieron los brazos
a golpe de sonrisa musicada?
¿Nunca viste un propiciado sí
en un as de corazones en reflejo?
¿No captaste, alguna vez o más,
la aceptación de tus mejores anhelos?
¿Nunca despertaste, un día,
entre las flores del consenso,
donde acudió la luna y la libélula,
y alguna mariposa que se escapó…
del corazón?
¿Nunca te dijeron desde lo eterno…
no tardes, te espero, siempre te espero?
Seguro que sí… alguna vez…
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada