Hoy me rendí a la sombra de un árbol en flor.
Dejé el crujiente sendero sin fin
y, en feliz fatiga, me acomodé en su copa.
Lucía flores bellas, sin aroma,
con color de recién puesta de largo en bello.
Unos pájaros que me suenan a cortejo,
con sus agudos sin ritmo ni concierto,
entorpecían, por una vez, la paz del bosque.
Pronto se fueron a esconder su amor,
y aparecieron los silencios bucólicos.
Apenas una charla de jilgueros melodiosos
adornaba el momento y la sombra.
Y más allá, romero en flor, lavanda
y, casi a tocar, brotes de pino, verde, suave…
en un cielo de azules penetrantes entre hojas.
Y uno, rendido a la sombra de un árbol...
...y un ambiente en flor.
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada