El sol se cuela por entre las rendijas de un atasco,
el muro se agrieta y se derrumba,
las caras de hielo se derriten paso a paso…
los rictus impertérritos se desvanecen,
el león salta la valla y va de libre,
y él ya entiende el desdén de las miradas,
el mensaje de los disimulos activos,
la magia de mirar a otra parte…
la cebra es feliz sin el carnívoro,
y, en el bosque, Caperucita ataca al lobo,
y éste le salta mostrando sus contentos,
las barreras se confunden y los márgenes,
hay libre circulación de la luz…
ha muerto la corrupción, amén.
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada