La vida es bella, ya lo decía Calderón… Pasan dos chicos oxigenados, conectados a unos auriculares, desconectados ellos, y en la plaza, unos abuelos columpian a una nieta... en catalán decimos que están “bocabadats”, o sea, con la boca abierta. Dos japonesas discuten, o hablan, vete tú a saber, pero parecen pontificar, aseverar, proclamar, gesticulan como un italiano, pero más categóricos. Un abuelo pasea niño con carro, se sienta, el niño duerme, él parece haber triunfado… La mañana se carga, las nubes bajan, las terrazas se despejan, es el mes de las lluvias, sin previo aviso, pero la vida es bella, ya lo dijo el de la Barca, Calderón.
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