dimecres, 16 de desembre del 2015

¡Sonrían, por favor!

El pato más desagradable es… el antipático.
Era tan pequeño… que la cabeza le olía a pies.
Era tan alto… que para cordarse los zapatos tenia que hacer noche en las rodillas.
Era tan delgada… que se tragó un hueso de aceituna y la gente creía que estaba embarazada.
¿Saben por qué las puertas de las iglesias son tan altas? Para que pueda entrar el Altísimo. (Con perdón, no quiero ser irreverente).
Era tan pequeño… que para bajar los peldaños de las escaleras, se tenía que tirar en paracaídas.
Era tan delgado… que lo alquilaban para limpiar los macarrones por dentro.
Era tan feliz… que tenía una Teresa en su vida.
Sonrían por favor... ¡Feliz Navidad!

Cap comentari:

Publica un comentari a l'entrada