Reloj, tómate un respiro... gracias

Mi reloj, incansable él, transmite latidos...
de un corazón que aún canta melodías,
de aquellas de todos los tiempos…
Es un tic tac, sin pausa ni aceleración,
definido, rítmico y cansino,
que devora los tiempos, vence a los cansancios
y se somete a todas mis ilusiones sostenibles.
Reloj que haces de los segundos del baloncesto,
eternos momentos en paro,
y de las cuotas de éxito y placer, meros simulacros.
Reloj que, no paras majo, me vas muy deprisa,
mira que tengo proyectos de plazo indefinido,
tómate un respiro hombre, gracias…