Han claudicado las arrogancias,
que van a lomos de caballos alados,
Pegasos incoherentes de los destinos
que aparcan de su viaje a ninguna parte.
Me adecento en un aparte del despropósito,
y voy a por el oxígeno del aire viciado,
y me desintegro por entre las esencias
que comparten los misterios y los inciertos.
Ha estallado el silencio de las musas
y en su resplandor queda un resquicio,
un soplo perdura volátil e inconcreto…
Se me acerca buscando cómplice
y, en abrazo, pululamos por entre las dudas
y los amagos de los abrazos infundados…
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada