No, no tuve muchos a los que se les podría adjudicar la condición de líder total, más bien algunos que serían líderes en su especialidad. Tuve un futbolero nato que la tocaba como los ángeles, y dominaba el patio con acierto, porque lo único que quería era jugar en paz. Recuerdo también un estudioso, un gran trabajador, que luego iba un poco sobrado, pero que yo, sabedor de su esfuerzo, intentaba comprender. Pero siempre me quedo con una niña, la Julia, que atemperaba los movimientos de la clase, tenía el don de la proporción y una bondad a prueba de cualquier malicia infantil, sufría por todo y por todos y emanaba paz y buenos sentimientos. Fue mi mejor valorada en la mayoría de aspectos. Los líderes, los mejores lo eran sin proponérselo, y yo siempre los valoré por su nobleza y esfuerzo.
M' ha caigut la llagrimeta... Ella et recorda sempre amb molt de carinyo. Un petonet dolcet Pere.
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