Me mandó un rayo de sol, de luz,
de su sol, de su luz, y lejos de cegarme,
pude ver la inmensidad de la belleza plena,
cuando los ojos interpretan
toda la fluidez de los silencios,
y la sonrisa es la puerta abierta,
de par en par, de todos los cielos mejorados.
Verte así, en vivo y en riguroso directo,
pactado y consentido, llena de emoción el alma,
el saxo ya no está tan lejos,
se acercan los tambores lejanos
para mantener el ritmo y dar paso...
a la exaltación de lo sublime.
Un corazón de fiesta bombea aromas de tu luz,
y las estrellas ocupan el cielo…
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada