dilluns, 16 de març del 2015

Aura

Se habla del mecenas, del protector,
del padrino, del hermano mayor,
o incluso, en su versión más noble,
del ángel de la guarda...
Ella era una libertad sin protecciones,
una esencia en transparencia total.
Era como un diamante neto,
un espíritu puro, como diría Platón.
No, no tenía ni hermano ni ángel,
ni padrino ni mecenas poderoso...
Simplemente la protegía su aura,
cual inocencia como ejército indomable,
y un reflejo de espadas invencibles
ondeando por sus vientos más bebibles...

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