Un abrazo a los abuelos que les cuentan cuentos a sus nietos, aunque sean de príncipes malos y brujas honradas, y les hablan de los huertos y de las hortalizas, y de los animales domésticos o del corral, de cuando ellos eran pequeños y vivían en el pueblo… Es curioso, pero los maestros notamos a los alumnos que llevan ración de abuelo que, en general, son ciencia pura para la cotidianidad. Algunos tienen un tinte de hombrecito que, particularmente, no me gusta... porque el niño ha de hablar y comportarse como un niño, pero, por otra parte, me encanta la riqueza de cultura sana y natural que les proporcionan. Impagables los abuelos que cuidan de sus nietos... aunque he leído por Facebook que en Inglaterra quieren darles un sueldo, pero esto sería ya otra historia…
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