Y después de la flor blanca,
que parece nevar el árbol,
y darle un aspecto navideño,
viene la excursión por las cerezas.
Después de la primavera del amor,
por los verdes y puros sentidos,
viene la madurez de los encantos,
pululando por los pinchos de las rosas.
Después de un buen sembrar,
viene un día mejor, en el mapa...
donde juegan las ardillas,
reducido a un tronco con refugios.
El árbol se desnuda, hasta de frutos,
y da paso a una estrella,
fruto de un constante ayer activo,
que hoy es luz, cual luciérnaga en la noche.
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