A veces los árboles no te dejan ver el bosque… Los lagartos al sol, parecen haber parado el tiempo, para desconcierto de los mosquitos inexpertos. La playa, medio vacía, si la miras desde la calle que acoge los restaurantes, pero si miras por los sitios resguardados, aparecen los primeros cuerpos gamba, alguna rubia con bikini negro y algún ligón de esos de gimnasio, que ha venido a completarse al sol. No me quejo, yo nunca me quejo, pero no me importaría tener veinte y pocos años viviendo en Finlandia y, en las vacaciones, acercarme al Delta del Ebro, y a la Costa Brava, y al Priorato, y a Tarragona, y a todas las exquisiteces de mi maravillosa Catalunya, que haberlas las hay y muchas...
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