Leía por ahí, sobre las propiedades terapéuticas de la música. Mientras, un adagio o un jazz suave mitiga el nerviosismo, las piezas barrocas estimulan el aprendizaje y el vals tiene una acción energética… y acaba aconsejando...¡Pon banda sonora a tu vida! De acuerdo total, siempre que no se entre en estridencia metálica que me producen malestar. Por mi parte, introduciría la música del bosque, pequeña cascada, vuelos de hojas, trino de pájaros en cortejo…
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada