Ella es nuestro tesoro familiar más preciado, es la simpatía innata,
la sonrisa limpia, el conocimiento de nuestro estado,
para dar aplomo y esperanza, sentido y camino a nuestra existencia.
La niña tiene un buen carácter donde solidifica su firmeza,
pero pronto se deshace en dulzuras,
y en el simple hecho de llamarnos por nuestro nombre
nos eleva a la condición de humanos bendecidos.
Todo el mundo tenemos como una obsesión por ver a Tessa,
es como nuestro origen, nuestro presente de júbilos,
y el futuro, que vemos que tan acertadamente le construyen sus padres.
Gracias preciosa por ser nuestra ilusión de cada día,
que la belleza, la salud y el talento, te acompañen siempre,
que el amor de la familia lo tienes en contrato indefinido.
Una lluvia de besos, y un abrazo a tus padres, autores del invento…
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