A nadie le gusta perder, cierto, se te pone cara de lloro, pero a veces toca. Es domingo, estoy en casa, estamos, de tarde deportiva, sofá y cervecita. He visto la carrera de coches, Fórmula 1, a los que no me creo mucho… me suena a montaje económico mal hecho, de difícil credibilidad, donde éxitos y las ventas que se generan de ellos siguen un orden, quizá no armónico ni establecido, pero sí a la demanda de los beneficios de su bien común. ¿Qué pasa? Se les enciende la bombilla, aquella del éxito, por turnos, de ayer a hoy… Lo siento, no me lo creo. Toca Mercedes, el año pasado Redbull , Ferrari duerme… el vil metal, y no del coche precisamente.
Ahora toca fútbol. En dos partidos, solución. Barça, mi Barça, pasión y sentimiento, tiene que ganar los dos partidos, seis puntos, y entonces es campeón de liga, pero uno de esos partidos es contra el Atlético, el de Madrid, que está en igualdad de condiciones. El Madrid, el real, ha de esperar a que alguno de los anteriores pinche… Recuerdo con placer la cara de la victoria. Los del Barça venimos de años antológicos… Hoy he visto la sonrisa de Hamilton… espero que la tarde termine feliz, con mi mejor sonrisa, antesala de la victoria final.
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada