La rana croa feliz en su nenúfar,
la encina madre acoge espléndida como siempre,
aunque le iría bien que la lluvia fuera más generosa.
Los pinos relucen como si fueran pequeños pinchos al sol,
las ardillas juegan en sus troncos, se divierten…
Los romeros son una bendición aromática, su flor blanca,
minúscula, tiene la discreción y el encanto de la violeta.
Cerca unos tomillos, complementan el efecto,
la brisa se impregna, se magnifica el paseo por el bosque,
aplauden los gorriones…
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