Anochece, una playa, una guitarra,
una luna lejana, unas olas de vaivén cansino,
alegría cuando chocan con la roca cercana.
Oscurece, el cielo se junta con el mar...
en el horizonte, que es azul pese a la noche.
La guitarra se presencia… con complejo de saxo,
pero en la sal sin sol de la paz nocturna,
suelta notas, como emotivos lamentos, como alegrías
...proclamando llantos que no acaban de llorar.
Mientras, anochece lentamente... que no es poco.
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