La gente corre, vuela, acude...
por los inventos, por los orígenes,
se va del puerto a los otros puertos,
a la otra parte del mar,
y de su pueblo a otros pueblos,
e incluso donde no hay pueblos,
porque habitan los misterios
de las noches más pardas.
Un vuelo de jilgueros se van
...con su música a otra parte,
en busca de su encina favorita...
y otros vuelos, siempre tienen destino.
Flamencos e ibis en el Delta...
¡Quién lo iba a decir, verdad!
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