Hoy, en mi paseo matutino, me han asaltado dos jóvenes con traje y una biblia en la mano, y me han encontrado receptivo. Me han preguntado si creía en Dios, y les he contestado con una larga parrafada... les he dicho que sí, que yo creo en el Dios del bien, en la verdad, en la justicia y en la paz, pero al llegar a este último concepto, he aclarado que se trata de aquella paz que no es producto del miedo. Y me ha venido a la cabeza la opinión de un descerebrado que decía que, al menos, en las dictaduras había un cierto orden… He terminado diciéndoles que hay muy buena gente que no creen en Dios y están entre sus mejores ángeles. Reconozco que no les he dado mucha opción a que me vendieran nada, y les he despedido diciendo que, vosotros, vuestra labor, si es libre y honrada, y estáis convencidos de lo que hacéis, también es edificante… El bien nace, cada día, en el corazón de cada uno, ¿verdad?
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada