Me voy al pueblo, el que huele a brasa y alcachofa, a carne y longaniza, pueblo de verdes que ya amarillean anunciando la siega inminente... pueblo en fiestas, donde los coches se saludan, como si no se hubiesen visto desde hace mucho tiempo, y la gente es más feliz y alegre que nunca. Vamos para allá, a ser partícipes de esta felicidad eufórica, la historia nos contempla, la familia presente y ausente, todos a una a rememorar los momentos que hicieron de nuestras vidas delicias emocionadas, que valen, muy mucho, la pena de revivir a gusto…
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada