El operario del ayuntamiento da la nota con su maquinita de cortar el césped de la plaza, de verdad que el ruido es ensordecedor, desagradable, continuo, parece eterno… El hombre se ensaña con la paz, bajo para verlo de cerca y parece un niño con pelota nueva, pienso que hace su trabajo, lleva protectores de oído y yo me recreo con el olor de la hierba recién cortada, que me suena a rebrote y esperanza primaveral…
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada