dijous, 3 de desembre del 2020

Con los ojos despejados


Las mascarillas, que, por cierto, no suelen ser muy higiénicas aunque sí parecen proteger bien, dejan los ojos como única referencia de expresión en una cara con la boca y la nariz tapada. Me encanta mirar los ojos de la gente, los hay que miran bien, con limpia nitidez y con luz propia, con dulzura explícita, con noble firmeza… Ojos claros, serenos, que de un dulce mirar sois alabados, decía el poeta, y acababa diciendo algo así como “aunque sea airados, ya que así me miráis, miradme al menos”. Ojos despejados...

Cap comentari:

Publica un comentari a l'entrada