Suena el despertador, la maravillosa siesta ha terminado, tocan baños termales... pero hoy incido en la magnanimidad de la siesta, el poder de seducción, la regeneración total, el placer infinito, el descanso reparador, por si te queda un atisbo a recomponer, o un sueñecito que te cuente el cuento de la lechera, pero... amigos, pónganle música de solemnidad, la siesta es una gran, inmensa, fiesta...
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada