Ya sin flores, Teresa ha recortado los brotes secos, ella sabe la distancia, las hojas reverdecen, crecen, salen de nuevas, emergen con un cierto vigor... me gusta verlas, incluso la viejecita que este año no ha hecho flores, parece que revive y conserva las hojas. En un tiempo razonable, ya empezarán a sacar brotes y la terraza cubierta se vestirá de gala, las flores blancas y de otros colores, cual mariposas mágicas, llenarán mi alma de gozo. Las orquídeas, pura belleza.
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