Dicen que hay que regar el huerto,
y hacerlo en el momento adecuado,
fuera del acoso del sol...
Hay que cuidarlo y alimentarlo bien,
quitarle las malas hierbas,
que a veces se introducen sin permiso
y ahogan los normales desarrollos de las relaciones.
¿En qué estaría yo pensando?
Pues en eso, en que las cosas no llueven porque sí,
así que la paz y el amor de un hogar se construye a diario,
con todos los grandes y pequeños detalles,
que hay mimar y regar con aguas sanas,
dejando que entre el sol y haya luz,
y el amor crezca muy feliz…
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada