La gente somos especiales, muy especiales, los bares están cerrados pero hacen cosas para llevar... la gente recoge su café, su cerveza, su bocadillo, o sus pastas o croissants, y se pone a beber y a comer por el entorno cercano. El espectáculo es denigrante, se fuma y es como si el bar hubiese abierto una terraza que va de un extremo a otro de la plaza… No tengo nada contra nadie, el señor del bar tiene derecho a ganarse la vida, pero hay personas que son poco responsables...
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