Quién no soñó alguna vez
que la princesa del castillo
le lanzaba su trenza
y alcanzaba todo el amor
que había soñado…
Quién no se condujo alguna vez,
a través de la luz de una sonrisa,
hasta llegar al alma tan amada
y que esperaba ilusionada…
Quién no escribió alguna vez,
una carta al cielo...
y entre las nubes siempre observó
una estrella de esperanza...
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada